Desde principios de este curso barajamos la posibilidad de llevar a cabo un Proyecto de Innovación en nuestro centro. Nos atraía la idea de que todo el Colegio “Giner de los Ríos” se involucrara en la tarea de la realización de un huerto, ya que Puertollano es una ciudad eminentemente industrial con problemas de contaminación y además con poca tradición en horticultura.
Queríamos “hacer sentir” a los alumnos y alumnas la maravillosa experiencia de ver crecer una planta de la que luego obtenemos alimento.
Ya decidida la participación, nos encontramos con un problema que creíamos insalvable: nuestro Colegio está situado en un cerro con escasas posibilidades de cultivar debido a la falta de tierra. Entonces nos preguntamos cómo podríamos solucionar este contratiempo.
Tras varias jornadas de reflexión, decidimos plantearnos la organización de un huerto urbano.
Se planificó el Proyecto “Un Huerto Urbano en mi Escuela”, que remitimos a la Consejería de Educación, Cultura y Deportes de Castilla-La Mancha, para que fuera valorado y recibir una dotación económica, y así, iniciar su puesta en marcha. Recientemente hemos recibido la comunicación de que había sido aprobado y podríamos contar con una aportación económica para su desarrollo. Posteriormente, se informó a toda la Comunidad Educativa solicitando su colaboración.
A partir de este momento, el Claustro y la Comunidad Educativa se vuelcan en hacer realidad toda la teoría que se plasmó en el documento remitido a la Consejería, involucrándose en su puesta en marcha.
Decidimos entonces, que la plantación se llevaría cabo en mesas de cultivo y garrafas de agua recicladas que los propios alumnos y alumnas aportarían al centro.
La ubicación de las mesas de cultivo será el rellano del último piso de uno de los edificios del Colegio, por ser el lugar donde las plantas recibirán más luz y calor.
El proyecto se inicia ya en el mes de enero, programándose una plantación de bellotas en botellas de agua recicladas por los propios alumnos. Durante este mes, también se contacta con el Ayuntamiento de la localidad, Concejalía de Medio Ambiente, para informar sobre la realización del proyecto y solicitar su colaboración. El Ayuntamiento responde ofreciéndose en la construcción de mesas de cultivo, así como en la dotación de tierra, de semillas, herramientas... y poniéndose a nuestra disposición en todo aquello que fuera necesario. A día de hoy, hemos recibido tres mesas de cultivo realizadas en el taller de carpintería, confeccionadas con material reciclado.
Igualmente, se solicita la colaboración de importantes empresas de Puertollano, como REPSOL y FERTIBERIA. Se les remite el Proyecto de Innovación, informándoles sobre los objetivos del mismo, así como sobre las actividades que se van a llevar a cabo para su desarrollo. El contenido del Proyecto les resulta interesante e innovador para una ciudad profundamente industrial.
Desde ese momento, el interés demostrado tanto por el Ayuntamiento, como por las empresas locales a las que se les ha pedido cooperación, se ha traducido en una estrecha colaboración apoyando el Proyecto desde el principio tanto con dotación económica como material. Fertiberia ha colaborado con el suministro de fertilizantes y regalos para los alumnos y alumnas (gorras) y Repsol ha ofrecido una ayuda económica con la que se ha equipado al centro de material necesario para desarrollar el Proyecto, además de obsequiar a los alumnos con un cuaderno de campo en el que irán anotando las actividades realizadas y las experiencias vividas.
La finalidad de nuestro Proyecto es que los niños y niñas de nuestro colegio vivan y disfruten de la gratificante sensación de ver cómo crece una planta desde una semilla, que conozcan el origen de los alimentos vegetales, y que se puede criar una mata de tomates o de pimientos...en un balcón, siempre que tengan los cuidados oportunos.
A lo largo del presente mes, se ha realizado la siembra de semillas en semilleros de pepinos, tomates, calabacines, cebollas, espinacas, guisantes, escarolas, judías verdes, tulipanes…Queremos completar el estudio de las plantas hortícolas con el conocimiento de las plantas aromáticas mediterráneas (romero, tomillo, orégano…), tan propias de nuestro entorno, utilizando para ello los sentidos: vista, olfato y tacto.
En el aspecto metodológico se ha tenido en cuenta la influencia del Proyecto en todas las áreas del curriculum, planificando y programando los estándares que se han de llevar a cabo atendiendo a la diversidad del alumnado en todo momento, modificando y adaptando materiales y actividades a las distintas edades y madurez de los niños.
Actualmente, nuestro semillero está germinando y se han hecho visibles ya los primeros brotes verdes y estamos a la espera de realizar la trasplantación del plantón desde el semillero a las mesas de cultivo.
Vale la pena el trabajo que estamos realizando, a cambio de la incalculable satisfacción del profesorado al ver la expresión en las caras de nuestros alumnos al comprobar que de una semilla diminuta, nace una planta.
Aún quedan muchas cosas por hacer, pero eso sí, se llevarán a cabo con una enorme ilusión y con el apoyo recibido de todos aquellos que han colaborado con nosotros.