La electromedicina: encuentro entre tecnología y sanidad

El Ciclo Formativo de Electromedicina clínica es un ciclo formativo de grado superior de la familia profesional de electricidad y electrónica, que se implantó en Cuenca en el año 2016-17. Este ciclo era solicitado por sus muchas salidas profesionales. Su duración es de 2000 horas, 400 de ellas corresponden a la formación en centros de trabajo.

 El alumnado de este ciclo debe formarse en diferentes campos relacionados, pues la función del técnico de electromedicina es muy variada. Quien se dedique a ello debe adquirir conocimientos tanto teóricos como prácticos; por un lado, debe conocer todo el equipamiento correspondiente al entorno hospitalario, así como todos los protocolos de mantenimiento y reparación; saber gestionar y planificar todo lo que es un entorno hospitalario; y, por otro lado,  el alumnado no solo debe aprender conocimientos en electrónica, electricidad y legislación, pues todo este equipamiento va conectado directamente a esta red eléctrica y electrónica, sino también debe formarse en imagen para el diagnóstico, elementos de neumática, hidráulica y aprender a manejar los diversos programas de mantenimiento y gestión que existen en el mercado.

 encuentro entre tecnología y sanidad

Las salidas profesionales de este ciclo son muy variadas, con una inserción laboral casi del 100 %, puesto que la persona técnica va dirigida a un entorno hospitalario donde realizará funciones de mantenimiento, verificación, en ocasiones, de asesoramiento, así como de gestión y planificación de todo el equipamiento necesario dentro de un hospital.

Su función principal hospitalaria es la de asesorar al personal médico qué máquina le conviene mejor para las pruebas que tiene que realizar, así como el protocolo de mantenimiento que tiene que llevarse a cabo en cada una de ellas. También dentro de la empresa privada su perfil profesional puede ir dirigido a la venta, asesoría de equipos o a la instalación de ellos.

Este ciclo tiene además la característica de ser un ciclo dual tipo B, lo que nos permite poder recibir clases en el instituto, en la universidad y en el propio hospital.

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El alumnado del primer curso está muy sorprendido con la organización dual entre universidad-hospital e instituto, pues al asistir al hospital un día a la semana durante un trimestre les ha ayudado mucho a hacerse una idea de cuál sería su labor una vez insertados en el mundo laboral. Allí han podido ver la práctica de la teoría aprendida en las aulas. Consideran que la parte universitaria ha sido todo un descubrimiento, tanto por la implicación del profesorado como todo lo relativo a la enseñanza, ya sea en la parte de electrónica como en la parte de documentación y legislación. Un aspecto positivo ha sido ver cómo trabajan todos los equipos de electromedicina, que están bastante más actualizados que los que tienen en la universidad, los cuales resultan un poco obsoletos, pero que, no obstante, les ha servido para realizar las pruebas de seguridad eléctrica y ensayos funcionales de cada equipo.

En la parte universitaria comenta el alumnado, que han tenido la suerte de contar con profesorado especializado para cada materia, quienes trabajan como docentes universitarios de la Universidad Politécnica de Cuenca, perteneciente a la UCLM.

En la parte hospitalaria el profesorado ha sido anestesistas —quienes les explicaron cómo funcionaban los equipos de quirófano— y personal técnico de rayos —que les formaron en los equipos relativos al servicio de radiodiagnóstico—.

En el instituto, dice el alumnado, aprenden los conocimientos clave que posteriormente necesitan en las prácticas, al no ser muchas las personas matriculadas en este ciclo, la relación con el profesorado es cercana, por lo que las clases, reconocen, han sido más amenas y muy instructivas.

Para cursar este ciclo no se necesita tener conocimientos previos pues se empieza desde lo básico. Con esfuerzo, confiesan diferentes estudiantes, no es difícil acostumbrarse a la dinámica y coger el ritmo. Aseguran, también que en este ciclo han aprendido multitud de cosas interesantes que han podido poner en práctica, además, han recibido una visión muy positiva sobre lo que sería trabajar en este sector.

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