En el CEIP San Isidro, en Alberche, partimos de dos principios educativos, por un lado, el de que la educación no es completa si no tiene en cuenta la historia e intereses del entorno que nos rodea y las características de toda la comunidad educativa; por otro, que nuestro centro no debe limitar sus actividades a las estrictamente académicas, sino que debe dar cabida a otras que permitan proporcionar a la comunidad educativa experiencias de aprendizaje.

Tomando como referencia estos principios y el entorno histórico de Alberche (entidad local menor fundada por colonos, agricultores y ganaderos), nació, hace 6 años, la idea de unirnos a la Red de Ecoescuelas y crear un huerto escolar.

A lo largo de este tiempo, nuestro huerto ha contado con el trabajo de abuelos y abuelas, padres y madres y, por supuesto, alumnado desde infantil hasta 6° curso de primaria. Este proyecto de Ecoescuela impregna nuestro trabajo y está presente en el resto de actividades y demás proyectos del centro.

Gracias al trabajo directo con el alumnado y a la información recabada en Ecoauditorías a toda la comunidad educativa de Alberche, nos dimos cuenta de una necesidad importante que debíamos trabajar. Alberche, como muchas otras localidades pequeñas cercanas a grandes centros urbanos, ha ido creciendo y cambiando sus motores económicos. La agricultura y la ganadería sigue siendo importante, pero ya no son la actividad económica principal de la localidad. El ritmo de vida se ha adaptado y, con ello, los hábitos saludables de nuestra comunidad educativa.
Recuerdo, cuando llegué al centro por primera vez, la cantidad de bicicletas que veía transitando por las calles, alberchanos y alberchanas de todas las edades se desplazaban con ellas por toda la localidad. Poco a poco, van disminuyendo las bicicletas y aumentando el número de coches que circulan alrededor de nuestro centro. Lo mismo ha ocurrido con la alimentación, a través del trabajo con el huerto escolar, hemos podido comprobar la necesidad de un cambio y una formación hacia una vida más sana y sostenible.

Hace 2 cursos, establecimos un grupo de formación con el que pretendíamos potenciar la adquisición de hábitos saludables. Esta formación va dirigida a toda la comunidad educativa (profesorado, familias, alumnado, ayuntamiento, etc.). Una de las propuestas fue que, cada mes, un aula del centro elaborara, con la ayuda de las familias, un menú saludable formado por verduras, frutas y alimentos de temporada, y el profesorado y el alumnado investigaría sobre los alimentos que se pudieran emplear en la constitución del menú, (hacemos hincapié en alimentos de temporada porque es importante conseguir un desarrollo sostenible). Actualmente, el alumnado y sus familias elaboran, cocinan y degustan el menú saludable y sostenible propuesto. El aula protagonista de cada mes coloca los nutrientes utilizados en la pirámide alimenticia situada en la entrada del colegio, además, elaboran trabajos donde se fotografían y explican los pasos que se deben seguir para elaborar el menú.
Toda la información y paneles que elabora el alumnado es publicado en redes sociales para que toda la comunidad educativa pueda tomar ideas y confeccionar una dieta sana, saludable y sostenible.

Este curso, nuestro objetivo, además de potenciar hábitos saludables en nuestra comunidad educativa, está consistiendo en formar al alumnado y hacerles reflexionar sobre la importancia de la sostenibilidad para un futuro mejor, así como que se tome conciencia de la importancia de no desperdiciar.

Por eso, el alumnado de educación infantil realiza un "menú de sobras". Las familias y profesorado de estos cursos realizan un segundo menú saludable y equilibrado que se elabore partiendo de los alimentos preparados en el menú principal. A este menú lo hemos denominado "Con las sobras puedo hacer..."; de esta forma, el alumnado de infantil nos ha mostrado que podemos hacer purés, croquetas, pizzas e incluso tostas saludables y sostenibles.

Este curso, aspiramos a conseguir una "2ª Bandera Verde", pero el objetivo final que persigue el claustro de profesorado de nuestro CEIP es mejorar la calidad de la enseñanza, promoviendo alumnado que reflexione y se preocupe por conseguir un mundo mejor, que tenga actitudes positivas y respetuosas hacia su entorno como herencia que debemos conservar.

Estar situados en una localidad pequeña como Alberche nos permite realizar junto con las familias y toda la comunidad educativa actividades que potencien ese futuro mejor que todas y todos perseguimos.